Warcraft: El origen Warcraft: The Beginning (2016)

Como aficionado a videojuegos y al cine desde hace décadas, ya para mí solo es un lejano recuerdo ese sueño de una adaptación buena de verdad de un videojuego al cine. Es normal, después de haber sufrido desde esas primeras adaptaciones, como “Super Mario Bros”, “Double Dragon” y “Street Fighter”; perder la esperanza con “Mortal Kombat”, “Tomb Raider” y “Resident Evil”; y terminar conformándome con al menos la sosa “Final Fantasy: The Spirits Within”. Muchos pensábamos que la clave era que esas películas no cambiaran el argumento de los videojuegos a los que adaptaban, es decir que fueran más fieles a lo que experimentamos cuando jugamos.

Así llega 2016 y Duncan Jones transporta al cine la que quizás sea la adaptación más literal de un videojuego a la gran pantalla. Y el resultado es eso, literal. Es decir, “Warcraft: El origen” resulta tan incongruente como el videojuego, aunque entonces no nos importaba, o directamente ni nos dábamos cuenta. Por ejemplo, en el juego no nos preguntamos por qué un personaje está luchando en un bando, para en la siguiente batalla unirse al otro. Puede que uno de los problemas de la película sea que solo dura 2 horas y apenas si tiene tiempo para explicar eso, ni para desarrollar a los personajes y que nos los creamos mínimamente, eso sin tener en cuenta las poco afortunadas actuaciones. Sin ir más lejos, los personajes humanos parecen un puñado de frikis haciendo cosplay barato entre paredes de cartón piedra.

Y es que el holgado presupuesto no se lo han gastado en el mundo real, sino en el digital. Por eso los efectos especiales y los orcos, obra y gracia de Industrial Light & Magic, son una pasada. Aparte de eso, he de reconocer que la peli me ha ofrecido un rato divertido, con multitud de guiños a sus fans. “Warcraft: El origen” es la primera piedra de una saga cinematográfica que tiene muy difícil repetir su superéxito en el terreno jugable, pero que al menos se ha mostrado tal como es.

Director: Duncan Jones Guión: Charles Leavitt, Duncan Jones Música: Ramin Djawadi Fotografía: Simon Duggan Intérpretes: Travis Fimmel, Paula Patton, Ben Foster, Dominic Cooper, Toby Kebbell, Ben Schnetzer, Robert Kazinsky, Clancy Brown, Daniel Wu, Ruth Negga, Anna Galvin, Callum Keith, Burkely Duffield, Ryan Robbins, Dean Redman, Glenn Ennis, Terry Notary, Elena Wurlitzer, Michael Adamthwaite, Anna Van Hooft, Callan Mulvey