El señor de los anillos: Los anillos de poder Lord of the Rings: The Rings of Power (2022)

Tras pagar una cifra que rondaba los 250 millones de dólares, e implicando en las negociaciones al mismísimo Jeff Bezos, en 2017 saltó la noticia que Amazon se había hecho con los derechos para producir una serie basada en el universo de “El Señor de los Anillos”. La idea era sin duda terminar de dar un motivo a la audiencia para ver Prime Video, que tras años de intentos infructuosos no terminaba aún de arrancar. El acuerdo había sido posible tras años de litigios por los derechos de la obra, pero ponía ciertas trabas a la serie. Por un lado en cuanto a número de temporadas y capítulos en cada una de ellas. Y por otro lado, no permitiendo adaptar directamente ninguna de las obras escritas por J.R.R. Tolkien o su hijo.
De esta forma, por culpa del lío de derechos en los que se ha repartido la franquicia, “Los anillos de poder” no solo tenía permitido inventar nuevas historias en este universo, mientras no contradijera a las obras originales, sino que estaba obligada a ello. En un mundo en el que los fans ven las obras a las que adoran como algo intocable, añadir tramas al universo que dio vida Tolkien es muy arriesgado. Estaban tocando algo demasiado sagrado como para intentar vender una obra apócrifa. La serie fue duramente criticada ya cuando en sus avances pudo verse que se había incluido en ella a elfos, enanos y hobbits de raza negra, lo que unió a los fans más extremistas junto a otros críticos con motivos más político.
La verdad, es que el tema de la diversidad racial que se impone en la serie pasa a ser una anécdota con el paso de los capítulos. Es sin duda más preocupante el poco carisma de los personajes. Personalmente no sabría decir cuál personaje me ha importado menos. Y creo que esa es una de las causas de que la trama no terminen de enganchar. Por más que Amazon Studios haya querido conectar con el espectador siendo continuista con la estética y el estilo de las famosas películas Peter Jackson, lo tenía difícil sin tener ni los mismos actores, ni la misma banda sonora.
En cambio esta serie sufre de una acuciante falta de ritmo, algo ya parece el gran mal del formato serie. Los 8 episodios, que pasan de la hora, se hacen muy largos. En ellos las conversaciones intrascendentes, vacías o repetitivas se suceden, y se intercalan de vez en cuando con alguna escena de acción gratuita, que se olvida cuando pasas al siguiente capítulo. A “Los anillos de poder” le cuesta y tarda en ponerse interesante, aunque me han parecido esperanzadores los giros de guion del último capítulo, desde mi punto de vista lo mejor del argumento. Al menos un resquicio de optimismo para una segunda temporada que promete muchos cambios. La razón es que la propia Amazon no acabó muy contenta con los resultados de una primera temporada que, para colmo, coincidió en la parrilla con la muy superior “La Casa del Dragón”.
Porque lo mejor de la serie es sin duda su impresionante nivel de producción. Y es que empezar de partida con la desorbitada inversión en la compra de los derechos no ha evitado que también sea extraordinario lo invertido directamente en la producción de la misma. El resultado es que los decorados, vestuarios, maquillajes y efectos especiales están a la altura de cualquier superproducción de cine. Por mucho que otras series hayan llegado a ser también comparadas con el cine, creo que “Los anillos de poder” tiene más momentos que consiguen impresionarnos.
Creador: Patrick McKay, John D. Payne Guión: John D. Payne, Patrick McKay, Stephany Folsom, Justin Doble, Jason Cahill, Gennifer Hutchison, Glenise Mullins, Bryan Cogman, Helen Shang, J.R.R. Tolkien Música: Bear McCreary, Howard Shore Fotografía: Aaron Morton, Óscar Faura, Alex Disenhof Intérpretes: Morfydd Clark, Robert Aramayo, Markella Kavenagh, Ismael Cruz Cordova, Charlie Vickers, Daniel Weyman, Lloyd Owen, Maxim Baldry, Owain Arthur, Tyroe Muhafidin, Megan Richards, Joseph Mawle, Nazanin Boniadi, Cynthia Addai-Robinson, Ema Horvath, Benjamin Walker, Sophia Nomvete, Tom Budge, Lenny Henry, Peter Mullan
Estados Unidos | 2022 | 557 minutos | Aventuras | Fantástico | Serie de TV | Fantasía medieval | Espada y brujería | Precuela |