Metal Gear Solid 4: Guns of the Patriots (2008)
La serie Metal Gear nació en un lejano 1987 en las entrañas de la vieja MSX y de la mano del entonces joven programador Hideo Kojima. Tras una pronta secuela para NES y otra de nuevo para MSX, fue en 1998 cuando una perturbación sacudió la historia del videojuego en forma de una nueva entrega, con el nombre “Metal Gear Solid”, para el Hardware de moda, Play Station. Un juego de infiltración, con una historia brillante contada con escenas realizadas con el mismo motor que el juego y un montón de elementos innovadores, tanto técnicos como jugables. Aparte de la infiltración, se daban una gran variedad de situaciones y se demostró que los final bosses tenían cabida en juegos más maduros si se introducían de manera inteligente. Un juego que destilaba originalidad porque no se parecía a nada anterior.
Solo 3 años después para el sistema sucesor se preparó una secuela que pondría al limite el nuevo hardware. “Metal Gear Solid 2: Sons of Liberty” para PS2 fue una entrega que, pese a mostrar un nuevo techo tecnológico, no contaría con el favor de todos por un problema con su protagonista. Resumiendo, no era quien esperábamos. Tampoco fue muy acertado el apartado jugable, aunque con todo quedó un juego bastante bueno, no a la altura de su antecesor pero merecía la pena jugarlo aunque solo fuese por los vídeos.
En 2004 y en el mismo sistema apareció “Metal Gear Solid 3: Snake Eater” una nueva historia que a modo de precuela introducía elementos jugables nuevos, intentando recuperar el espíritu del primer “Metal Gear Solid”. Evidentemente no podían faltar las escenas de vídeo que junto con la nueva historia la hacían una aventura apasionante. Hasta aquí una saga con multitud de tentáculos con microentregas en múltiples plataformas, remakes, versiones y un largo etcétera. No lo he dicho pero “MGS3” y sobre todo “MGS2” fueron 2 de los juegos mas hypeados de la historia, además de ser de los más caros de producir. Un hype y un presupuesto que ha heredado la nueva entrega, “Metal Gear Solid 4: Guns of the Patriots”, que es seguramente la mayor superproducción de la historia de los videojuegos, si es que se le puede considerar como un videojuego en toda su extensión.
Hideo Kojima toma plenos poderes de la producción para, con todos los medios necesarios, realizar su obra magna, que consiste ni más ni menos que en una extensión con sabor a refrito de todas las anteriores entregas (con algo más que guiños para los fans) escasamente jugable y en definitiva un colofón para su historia. Técnicamente perfecto. Gráficos de altísimo detalle que poco tienen que envidiar a los prerrenderizados para cine. Animaciones corporales y faciales realizadas con la última tecnología. Para muestra del nivel de detalle (y despilfarro) al que se ha llegado, el sonido del juego se ha grabado en los estudios Skywalker y se encuentra en el disco sin comprimir, un aspecto que ni el mejor oído humano puede apreciar. Todo para dar vida al verdadero sueño de su creador: una película interactiva. Por desgracia más película que interactiva.
Si en las 3 anteriores entregas la parte jugable pugnaba con las escenas cinemáticas por el protagonismo, en esta ocasión las parte jugable es notoriamente de inferior duración y además de menor calidad. Una proporción mal medida que, al contrario de lo que podría pensarse, no le hace ningún favor a la historia porque, además de la ida de olla de la que se nutre, tanto esta como las anteriores, se abusa del relleno innecesario, se introduce de manera ridícula elementos dramáticos (y románticos), se improvisan sorpresas que ya no sorprenden (resultan que aquí todo el mundo estaba de parranda) y se convierte en una historia desesperantemente interminable. Todo esto consigue que el guión sea más denso y más flojo que los 3 anteriores, aunque eso sí, igual de espectacular.
En las pocas ocasiones en las que podemos intervenir (jugando), solo puedo sacar como positivo la variedad, porque tanto las fases llanas como los bosses son una compilación de los mejores momentos de la saga con muy poca innovación. Una falta de ideas que solo notaremos los veteranos seguidores de Snake. En definitiva, una decepción darle un final (? nunca se sabe) así a una serie que ha escrito algunas de las mejores líneas de la historia del videojuego.
Desarrollador: Kojima Productions Guión: Hideo Kojima, Shuyo Murata Música: Harry Gregson-Williams Intérpretes: David Hayter, Christopher Randolph, Cristina Pucelli, Paul Eiding, Khary Payton, Debi Mae West, Beng Spies, Patric Zimmerman, Jennifer Hale, Quinton Flynn, Phil LaMarr, Lee Meriwether, Kim Mai Guest, James Sie, Dave Fennoy
Japón | 2008 | Videojuego | Acción | Aventura | Sigilo | Shooter en tercera persona | Shooter | Vista en tercera persona trasera | Gráficos 3D | Espionaje | AAA |