Batman: Arkham Origins (2013)

Batman: Arkham Origins (2013)

Después de las dos entregas triunfales de la serie Arkham, llega el momento en el que Batman vuelve por la pasta. De acuerdo, “Arkham Origins” sigue teniendo una trama principal muy buena y la jugabilidad es tan robusta como siempre. Pero la falta del estudio que obró el milagro en dos ocasiones resulta definitiva. Rocksteady se está encargando de dar el salto a la nueva generación, así que esta precuela de los anteriores títulos puede considerarse un cambio de skin de “Arkham City”, encargado al primero que pasaba por allí, hecho sin pasión, hecho por la pasta. El juego apenas aporta novedades jugables a la serie, las misiones secundarías no están nada trabajadas y parecen de un juego menor, existen cantidad de glitchs que nos interrumpen constantemente, e incluso he tenido la impresión de que gráficamente el juego ha empeorado, y mucho. En definitiva, el acabado del juego está muy lejos de ser tan fino como hasta ahora. Aun así, he vuelto a disfrutar con lo bueno que se ha rescatado de los anteriores “Arkham”. Y es que me declaro fan absoluto de está trilogía, que al menos en dos ocasiones ha marcado una generación en el mundo del videojuego, y ha convirtiendo a Batman en personaje de videojuego de pleno derecho.

Desarrollador: Warner Bros. Games Montréal Guión: Corey May, Dooma Wendschuch, Ryan Galletta Música: Christopher Drake Intérpretes: Carlos Alazraqui, Troy Baker, JB Blanc, Brian Bloom, Steve Blum, Michael Cornacchia, Robert Costanzo, Chris Cox, Jon Curry, Grey DeLisle, Mylène Dinh-Robic, Robin Atkin Downes, Jake Eberle, Richard Epcar, Dave Fennoy

CanadáCanadá | 2013 | Videojuego | Acción | Aventura | Mundo abierto | Metroidvania | Sigilo | Beat 'em up | Vista en tercera persona trasera | Gráficos 3D | AAA |